Aunque suene a título de película, lo que queremos decir sutilmente es que los hombres también fingen. Nosotras siempre tuvimos la fama por fingir orgasmos, y ahora (o mucha gente lo habrá descubierto mucho antes) nos damos cuenta de que ellos también hacen mucho teatro en sus relaciones sexuales.
Y es que antes, el papel del hombre y el de la mujer en la cama eran muy diferentes. Ellos tenían que disfrutar y ellas hacer disfrutar… por eso ellas fingían para engordar el ego de sus hombres o disimular ciertas diferencias. Hoy en día la igualdad ha llegado a la cama, y aunque eso se traduzca en placer para ambos, la presión psicológica también es compartida. Tanto ellos como ellas sienten la necesidad de hacer un buen papel, y de hacer sentir bien a la pareja. Por eso, ahora sí, ellos también fingen.
Pero ¿En qué fingen los hombres? ¿Qué nos ocultan? Os descubrimos algunos de sus secretos e inseguridades.
Ellos siempre tienen miedo a no dar la talla
Resulta que nosotras nos creíamos inseguras, por no llegar a parecer sexy, activa en la cama, con iniciativa… pues ellos se sienten exactamente igual, y además añádele la preocupación por el tamaño de su pene: ¿Será lo suficientemente grande? ¿La haré llegar al orgasmo? ¿Conseguiré contener la eyaculación durante un tiempo? A veces esta tensión es tan grande que consigue bloquearlos, traduciéndose en eyaculación precoz, o incluso disfunción eréctil pasajera. ¿Cuál es la clave para que tu chico se sienta más seguro y relajado? Hazle saber lo que estás disfrutando. No te pedimos que finjas, sino que destaques lo bueno que hace, y que le quites importancia a los objetivos que él se marca, como por ejemplo que tú llegues al orgasmo. Hazle pensar que lo importante es el camino, no la meta.
Él quiere darte el mejor orgasmo de tu vida
Y tú resulta que no valoras el esfuerzo… A veces disimulan, se hacen los duros, e incluso parece que van a su bola sin pensar en un segundo en ti. Sin embargo suele ocurrir todo lo contrario: están deseando que les hagas ver que te han dado el mejor orgasmo de tu vida. Lo que pasa es que se esconden tras una máscara de dureza y hostilidad, por si no consiguen su objetivo. Hazle ver con toda la naturalidad del mundo que tú también te esfuerzas en que él disfrute.
Ellos también necesitan preliminares
Siempre se piensa que la mujer es el centro de atención de los preliminares, la única que los necesita para tener una relación sexual satisfactoria. Sin embargo esto no es del todo cierto, ya que algunos hombres también los necesitan. Ellos siempre han tenido la fama de “querer siempre sexo”, de estar siempre dispuestos, sin más. Pero hoy en día, por muchas ganas de sexo que tengan, estar siempre a punto puede ser complicado: el estrés, la fatiga provocada por la actividad diaria, y el ritmo de vida que llevamos actualmente, pueden provocar que la respuesta sexual del hombre sea más lenta o débil de lo que había sido habitual hasta ahora. Por eso, debes tener en cuenta, que habrás días en los que él necesite jugar previamente tanto como tú. Además no de cualquier manera, porque tendemos a ser repetitivos en cuanto a las caricias al miembro masculino, y llega un momento en que ellos llegan a “inmunizarse” a las mismas. La mejor opción cuando veas que a tu chico le cuesta empezar, es regalarle un poco de sexo oral. Es infalible para encender motores y ponerlos a mil.
No todos los hombres quieren hacer un trío
Aunque sea la fantasía más repetida entre los hombres, a la hora de la verdad pocos se enfrentarían a la situación. Resulta que imaginarse con dos mujeres puede ser muy excitante, pero satisfacer a dos mujeres se convierte en algo “intimidante”. Si normalmente tienen miedo a no cumplir con las expectativas de una… imaginaos de dos. Quizás puedas ayudarle a seguir fantaseando, hablando del tema, recreando mentalmente la situación imaginaria de un trío… pero sin llegar a ponerlo en práctica.
Los hombres no siempre quieren sexo
Por eso, si te rechazan en alguna ocasión, observa la manera en que te dice no, porque no siempre es algo negativo. Si lleváis poco tiempo, quizás debas preocuparte, porque en el inicio de las relaciones la pasión supera a todo lo demás. Sin embargo, después la cosa se calma, y puede decirte que no si está cansado, estresado o preocupado por algo. Sin embargo, para interpretar correctamente ese NO, debes englobarlo al resto de la relación. Si es un hecho aislado y sigue siento atento y cariñoso contigo, deberás entender que un día no le apetezca tener sexo… a nosotras también nos pasa.
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