Métodos de transición de niños a hombres en diferentes culturas

Hay ocasiones en que se ven ciertas cosas en otras culturas y das gracias por haber nacido en otro país donde esas cosas no pasan, más que nada porque, cuando lees sobre ellas, ya te ponen el vello de punta, y en el caso de las pruebas que les hacen pasar a los niños para convertirse en hombres, en según qué tribus o culturas, puede ser mucho más el sufrimiento que el hecho de quedarte siendo un niño para siempre (porque algunas de ellas son peliagudas).

¿Quieres saber algunas de ellas? Aquí te contamos varias:

• En algunas tribus, cuando llega la edad de iniciación y de transición de niños a hombres, los ancianos de la tribu cogen a todos esos niños y se los llevan aislándolos de todos para enseñarles solo las cosas que deben hacer los hombres y hacerles olvidar lo que sería un comportamiento infantil. Entre lo que les enseñan están el fumar o el cazar.
• En otras tribus, en el caso de las mujeres, en su paso de niña a mujer, lo que marca el cambio es en realidad la primera eyaculación que tiene (en el caso de los hombres también se produciría eso.
• También se da en otras culturas el paso de niña (o niño) a mujer (u hombre) al cambiar su status de soltera a casada porque muchos lo que hacen es establecer un matrimonio concertado.
• En el caso de las niñas, hay una tribu que, cuando llega la transición, mella los dientes de las mujeres dejándolos de forma puntiaguda como si fueran dientes de tiburón, según dicen porque así son más atractivas y además satisfacen a los espíritus que las protegen más. Menos mal que ahora es opcional esto.
• Otro de los rituales de transición que se suelen dar es el de hacer puenting. Si, si, dirás que es algo normal pero, ¿sin cuerda? Pues eso hacen en una tribu donde los más jóvenes han de tirarse desde una altura de 20-30 metros y sobrevivir, claro, algo un poco más difícil.
• Uno de los más duros que hemos encontrado por internet es el ritual según el cual los niños, para pasar de chicos a hombres, han de ser cortados en la espalda, el pecho y las nalgas con un diseño predeterminado para que parezca la piel de un cocodrilo. Por supuesto, el proceso es doloroso porque no usan nada para controlar el dolor y muchos mueren por las infecciones que se dan.
• En Dakota del norte, por ejemplo, hay un ritual que también tiene que ver con la resistencia de los guerreros (y del paso de niño a hombre) comenzando con estar sin comer, beber o dormir durante cuatro días seguidos para, después de eso, cortar la piel de la espalda y hombros y clavar las extremidades en madera suspendiéndolos con pesos atados a las piernas. Si eso no fuera suficiente, una vez sobrevive a eso tiene que cortarse los meñiques y recorrer la aldea unas cuantas veces.
• Nos venimos un poco más cerca de España para encontrar una tribu donde, para pasar de niño a hombre, son afeitados y agasajados con una fiesta por todo lo alto. Eso sí... Cuando termina lo llevan a una choza aislada en las montañas (que ha de ser construida por la familia de éste) y el chamán circuncida al niño cortándole el prepucio. No puede salir de esa casa ni comer ni beber hasta que la herida se le cura. Lo peor es que esa navaja que usan es para todos la misma, es decir, que el riesgo de infecciones es extremo.
• ¿Y te imaginas tener que azotarte varias veces sin mostrar dolor? Pues eso ocurre en otra tribu que celebran así el paso a la edad adulta de los jóvenes adolescentes.
• También para las mujeres hay casos igual de extremos, como por ejemplo en Uganda que, para pasar de niña a mujer, han de sobrellevar la pérdida parcial o total del clítoris para así mantenerla fiel a su marido y que no sea promiscua... Aunque no sabemos si será por eso o porque son muy inseguros por allí.

Como ves, son muchos los rituales que existen y que hacen que pongas el grito en el cielo ante lo que todavía en esta época de la vida y de desarrollo ocurre. Así que, si no te gusta, menos mal que no has nacido en ella, ¿verdad?